El Gobierno buscó hoy despejar las dudas del sector financiero sobre el impacto negativo que pueda generar en los emprendimientos vigentes de obras públicas el escándalo por las presuntas coimas pagadas durante el kirchnerismo, un caso que involucra a numerosos empresarios.

En una reunión liderada por el ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, y el secretario de Política Económica del Ministerio de Hacienda, Guido Sandleris, con representantes de entidades financieras, el Gobierno ratificó que la obra pública continúa.

En el encuentro también participó el secretario de Participación Público Privada, José Luis Morea.

La reunión se realizó durante la mañana en el piso quinto del edificio de Hacienda.

Estuvieron representantes los bancos más importantes del país: HSBS, ICBC, BICE, Citi, UBS, Banco Mayorista, Santander, Itaú, Supervielle, Banco Francés y Banco Galicia.