El ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, destacó en el Congreso que los contratos de participación público privada (PPP) en obras viales generan una inversión de «8 mil millones de dólares» y defendió la creación de un fideicomiso para «destrabar» financiamiento a empresas afectadas por causas judiciales.

El funcionario nacional concurrió a la Comisión Bicameral de Seguimiento de los Contratos de Participación Público Privada que se reunió en el Salón de las Provincias del Congreso, acompañado por el secretario de PPP, José Luis Morea, y la titular de la Dirección Nacional de Vialidad, Patricia Gutiérrez.

Además de hablar sobre las obras viales en ejecución y proyectadas a través de este sistema, los funcionarios defendieron la creación del fideicomiso, un mecanismo que está contemplado en el Presupuesto 2019 que se debate en la Cámara de Diputados y que genera dudas en la oposición.

Fue Morea el encargado de resaltar que el Gobierno está «creando un nuevo fideicomiso individual que permita canalizar los recursos trabados en la banca internacional a favor de clientes que venían negociándolos hace varios meses y que por causas judiciales los comités de cumplimiento de cada banco les impedía acceder».

Sin nombrarlas, se refirió así a las compañías de obra pública involucradas en la llamada «causa de los cuadernos» sobre el presunto pago de coimas al Gobierno del kirchnerismo para acceder a contratos de obra pública.

Morea sostuvo que el fideicomiso proporciona «un nuevo marco de integridad que le dé una nueva categoría de transparencia a los contrato y a las empresas involucradas en este proyecto de PPP», pero la oposición lo criticó dado que el Estado deberá operar como garante a través del Banco Nación.

El diputado del Frente Renovador Marco Lavagna subrayó que la Ley de PPP no permite participar en un programa de este tipo a empresas involucradas en delitos y que con la creación del fideicomiso hay «un problema legal a futuro», al tiempo que advirtió que «el Estado está asumiendo un riesgo».

El senador salteño del Interbloque Federal Juan Carlos Romero reclamó a su turno que el Gobierno trabaje en «cambiar las prácticas empresarias».

Sin embargo, Morea insistió en que este fideicomiso «le va a permitir al Estado la integración de un marco de integridad que por sí solo no se podía imponer» y remarcó que «las empresas van a poder optar por tomar financiamiento de bancos privados pero sometiéndose a las nuevas normas de integridad que coinciden con las mejores prácticas a nivel internacional».

Dietrich evitó entrar en ese tema y, en cambio, destacó que «la inversión de los PPP es de 8 mil millones de dólares, 6 mil en los primeros 8 años y los 2 mil restantes en los dos años siguientes», al tiempo que puso de relieve que se generarán «23 mil puestos de trabajo».

El ministro destacó que esta inversión se traducirá en «3.300 kilómetros de obras totalmente nuevas», entre ellas «más de 800 kilómetros en autopistas, más de 1600 en rutas seguras y 250 kilómetros de obras especiales».

Además, puso de relieve la «competencia» entre empresas generada a través de este sistema y precisó: «Hemos tenido una oferta muy exitosa. La más exitosa licitación del primer PPP en Latinoamérica, con ofertas por 32 mil millones de dólares, siete empresas internacionales, la constructora más grande del mundo que es CCA de China. Empresas españolas, italianas, francesas, colombianas».

Dietrich sostuvo que «se ha demostrado» que el sistema de PPP «es eficiente y que se cumplen mejor los plazos en la obra pública tradicional», tras lo cual agregó: «Se ve en la Ruta 3, entre Buenos Aires y Bahía Blanca, que esta herramienta hace que en vez de que se comience en 10 años y se termine en 15, se comienza hoy, se termina en 5 y se paga en 15».

«Entre lo inaugurado, en ejecución y proyectado tenemos hoy 2900 kilómetros de rutas. Hay 16.600 kilómetros de rutas en las que hemos intervenido, algunas pavimentaciones como en la 40 en el Iberá, en otras con re pavimentación como la 19 en Corrientes», indicó al realizar un extenso listado de obras en ejecución.