En la previa al comienzo de la temporada de vacaciones de verano, en las que algunos argentinos viajarán a destinos en el exterior, principalmente Brasil, el Gobierno amplió la red de centros para la aplicación de la vacuna contra la fiebre amarilla.

Esa vacuna es una recomendación sanitaria para viajar a algunas zonas del país e, incluso, es un requisito que exigen varios países.

En ese sentido, la Secretaría de Salud indicó que la recomendación alcanza a las personas que viajen a los estados brasileños de Paraná, Santa Catarina y Río Grande do Sul, así como también señaló que la excepción son algunos estados del nordeste brasileño, pero para el resto del territorio del país vecino continúa vigente.

Para evitar las largas colas e inconvenientes que hubo el verano pasado, el Gobierno decidió ampliar la red de centros disponibles para la aplicación de la vacuna contra la fiebre amarilla y subrayó la importancia de realizar la consulta médica al menos cuatro semanas antes del viaje para que un profesional defina la indicación o no de esa cobertura sanitaria.

Asimismo, remarcó que, en caso de corresponder, el turista deberá recibirla al menos 10 días antes del viaje y subrayó que la vacuna se aplica una sola vez en la vida.

La vacuna ofrece una inmunidad efectiva al 99% de las personas vacunadas en un plazo de 30 días,comienza a actuar diez días después de su aplicación y está contraindicada en determinados casos, como el de las personas mayores de 60 años.

La fiebre amarilla es una enfermedad vírica aguda y hemorrágica, transmitida por mosquitos infectados, y el término «amarilla» alude a la ictericia que presentan algunos pacientes y que en un principio lleva a confundir los primeros signos con la hepatitis.

Con la ampliación informada por el Gobierno, ahora más de 150 centros aplicarán esta vacuna, entre hospitales, unidades sanitarias y salitas, incluida la sede de la Dirección de Sanidad de Fronteras, ubicada en el barrio porteño de La Boca.